La impresión 3D es una solución tecnológica avanzada que ha demostrado su eficacia y rentabilidad en diversas industrias. El ROI de la impresión 3D (retorno de la inversión) sigue siendo un tema que preocupa a muchas empresas.
Por eso, hoy hemos querido compartir una breve y precisa guía sobre cómo calcular el ROI de la impresión 3D, los costes por pieza y las consideraciones que debemos tener al optar entre uno u otro método de producción.
También puedes valorar ahora y de forma sencilla el tiempo de amortización del equipo en el que estés interesado con nuestra Calculadora ROI la cual te guiará paso a paso hasta el resultado, en base a tus necesidades de producción. Pruébala aquí.
Generalmente, el primer paso sería crear una matriz de trabajo, que bien puede ser una hoja de cálculo, y tratar de incorporar en ella la información financiera y económica (coste de materiales, depreciación del activo, horas hombre de trabajo).
Pero antes, conviene preguntarnos: ¿vale la pena tercerizar o realizar la producción de manera interna?
Producción Interna o tercerización
Si tu empresa necesita impresiones en 3D de forma muy esporádica, o piezas muy grandes (dimensiones de varios metros) que requieren materiales no convencionales, la mejor opción será probablemente subcontratar la labor.
Por supuesto, al subcontratar pierdes el control sobre el coste y el tiempo de entrega. Y estás supeditado a las condiciones del proveedor del servicio que hayas elegido. Hay que tener en cuenta también que, hoy en día, con los procesos de post-procesado de 3D se pueden unir piezas de grandes dimensiones con tiempos y costes muy reducidos, por lo que, el tamaño de la pieza a fabricar no es obstáculo para gestionar la fabricación de forma interna.
Si por el contrario, la necesidad resulta algo más frecuente, se necesita tener máximo control de la propiedad del diseño (no ceder información a terceros) o se quiere poder fabricar en el mismo día las piezas -periodos muy ajustados- como parte del proceso interno de la empresa conviene valorar la posibilidad de la producción interna.
Para ello, has de conocer los principales elementos a tener en cuenta a la hora de calcular los costes y el ROI de la impresión 3D.
Calcular costes y ROI de la impresión 3D
Para calcular los costes y ROI de la impresión 3D hemos de saber cuánto cuesta la producción de una pieza. En el cálculo de este coste por pieza consideramos cuatro factores:
- Coste de propiedad del equipo (amortización o depreciación).
- Coste de los materiales.
- Mano de obra (recurso humano).
- Otros costes indirectos asociados (energía eléctrica, alquiler…)
La propiedad del equipo
La inversión en maquinaria, el coste de instalación y mantenimiento o los contratos de asesoría conforman el rubro de propiedad del equipo. Este es un gasto en el que se incurre tanto si la máquina no se utiliza como si produce cientos de piezas al mes.
Para calcular este coste total de propiedad del equipo, debemos preguntarnos una serie de cuestiones:
- ¿Existen costes de instalación, capacitación o algún tipo de gasto inicial que se deba sumar al coste de la máquina?
- ¿Existe un contrato o contratos adicionales obligatorios durante la vida útil de la máquina?
- ¿La máquina requiere algún tipo de accesorio, pieza o herramienta, que no esté incluido en el paquete de fábrica, para su correcto funcionamiento?
- ¿Cuáles son las necesidades de mantenimiento de la máquina, considerando un nivel de actividad medio?
- ¿Cambian estas necesidades si los niveles de producción se incrementan?
El coste de propiedad del equipo se puede adjudicar dividiendo ese valor obtenido entre el número de meses en que tardará en depreciarse la maquinaria. El resultado, a su vez, se divide entre el número de piezas producidas en ese determinado periodo de tiempo.
Así, si tenemos un coste de propiedad de 5.000 euros, por ejemplo, y pensamos que la vida útil de esta maquina es de 10 años, dividimos ese valor entre 120 meses, si es que deseamos hacer una evaluación mensual.
Esto nos informa de un coste mensual de propiedad de 41,67 euros al mes. Si suponemos que, durante un mes, fabricamos 100 piezas, esto significa que para cada una de ellas adjudicaremos un coste de propiedad de 4,17 Euros.
Materiales y Consumibles
Las materias primas, así como cualquier otro consumible necesario para la producción de piezas, son costes variables. Como lo que deseamos hacer es una proyección, tendremos que acudir a la información de periodos ya cerrados.
En cualquier caso, es importante saber:
- ¿Cuál es el coste de cada tipo de material?
- ¿Cuánto material se requiere para crear una pieza determinada, incluido el desperdicio?
- ¿Cuál es la vida útil de los materiales?
Mano de obra
La impresión 3D puede reemplazar complejos flujos de trabajo característicos de los métodos de fabricación tradicional. Generan, así, ahorros sustanciales que contribuyen a mejorar aún mas el ROI de la impresión 3D.
La mayoría de las impresoras 3D están optimizadas para facilitar su uso. Mientras, el mantenimiento regular o el cambio de materiales en las máquinas industriales puede implicar tareas que requieren mucho tiempo y de un operador experto.
Los flujos de trabajo varían según la tecnología, pero en la mayoría de los casos incluyen limpieza de piezas y eliminación de soportes o exceso de material. Existen algunas soluciones que automatizan estas tareas y simplifican el flujo de trabajo de lavado y postcurado de la impresión 3D.
Para el cálculo relativo a la mano de obra, conviene cerciorarse de:
- ¿Cuál es el flujo de trabajo completo para producir piezas?
- ¿Cuáles son los pasos específicos requeridos para configurar una impresión, cambiar materiales y postprocesar piezas?
- ¿Cuánto tiempo llevará postprocesar una pieza terminada?
- ¿Existen herramientas o dispositivos disponibles para automatizar algunas de estas tareas?
Otros costes
Con estos costes directos ya conocidos, solo queda calcular los indirectos, como consumo de energía eléctrica, alquiler de la planta de trabajo y otros que consideres asociados a la producción de las piezas.
Además, hay que sumar que existen otra serie de beneficios añadidos de tener la impresora 3D en la empresa y que son difícilmente cuantificables en cifras, por ejemplo, la opción de fabricar piezas a medida en tiempo real y a costes ínfimos para departamentos o áreas que aún no se están planteando usar la tecnología 3D (mantenimiento industrial, prevención de riesgos laborales, departamentos comerciales que necesiten piezas de demostración/apoyo comercial, etc.).
Conocidos los anteriores costes, ya puedes comparar estas cifras con los costes de fabricar mediante métodos tradicionales, o de subcontratar la labor.
¿Te convences ahora de los beneficios que puedes obtener al invertir en la impresión 3D en tu negocio? El ROI de la impresión 3D está garantizado.
Si tienes alguna duda, solo tienes que contactar con nosotros. En SICNOVA siempre estamos preparados para apoyar los proyectos de impresión 3D de tu empresa.
