El Ayuntamiento de Pamplona ha encargado recientemente un detallado estudio sobre el estado de conservación de las figuras que componen su tradicional Comparsa de Gigantes y Cabezudos, un elemento patrimonial muy conocido popularmente, ya con más de un siglo de historia a sus espaldas, utilizando para ello tecnología de digitalización 3D.
El informe incluye el proceso de análisis tanto de las 25 figuras que componen la Comparsa como del resto de elementos asociados, como trajes y adornos. Para ello se ha realizado una digitalización en 3D de todas las figuras (8 gigantes, 5 cabezudos, 6 kilikis y 6 zaldikos), junto con un completo estudio fotográfico. Los elementos de mayor tamaño, como los gigantes, se han digitalizado de forma separada con tecnología de escaneado láser y fotogrametría, mientras que el trabajo de digitalización de los elementos de menor tamaño lo ha llevado a cabo la empresa One Voxel, con un escáner 3D de luz estructurada EinScan 2X Plus de Shining 3D.
La digitalización de los gigantes se ha llevado a cabo tanto con sus ropajes al completo, como dejando solo a la vista su armazón. De este modo se ha podido almacenar una copia digital de estas figuras, con fines de catalogación y respaldo digital. Teniendo en cuenta la antigüedad de estas figuras (alcanzan ya los 160 años) y los materiales en los que están construidas, así como el uso festivo que se les da habitualmente en la calle, el hecho de contar con un respaldo digital fiel a la realidad aporta una gran seguridad de cara a posibles restauraciones o daños que puedan sufrir. Por ejemplo, en el caso de los armazones se han venido utilizando resinas epoxi y fibras de vidrio frente al cartón original, para garantizar la consistencia de algunas partes o reforzar las estructuras, pero en el caso de las cabezas se ha mantenido normalmente el material original.
Para este estudio se han realizado análisis químicos de los diferentes materiales que componen las figuras, fotometría ultravioleta para observar repintes, mapeo de patologías en cada una de las figuras, además de un análisis sobre la forma en la que son transportadas y guardadas las figuras, cómo se conservan los trajes y cómo se interviene en las figuras cuando sufren desperfectos.
No en vano, una de las conclusiones del informe es que las figuras presentan daños propios de su edad y de su uso habitual, por lo que con los datos obtenidos, el ayuntamiento pamplonés quiere elaborar un proyecto de intervención a medio plazo. De ese modo se puede ir actuando sobre cada una de las figuras, restaurándolas en base a los criterios actuales de intervención en bienes patrimoniales y atendiendo a un proceso de análisis de las necesidades específicas de cada elemento.
Este ejemplo muestra cómo la digitalización 3D es un elemento cada vez más habitual a la hora de planificar actuaciones de restauración artística o catalogación digital del patrimonio histórico, con unos resultados de precisión y realismo más que sobresalientes.
