Estas máquinas posibilitan imprimir en 3D en varios colores, ya sea de forma simultánea o a través de otras técnicas. Te explicamos cómo.
La impresión 3D abre todo un abanico de posibilidades a la hora de elaborar prototipos y piezas finales de forma rápida, a un bajo coste y sin necesidad de recurrir a los clásicos y costosos moldes industriales. Las creaciones de estas máquinas han sido típicamente monocromáticas al ser fabricadas con PLA, PETG o Nylon de un único color, pero la irrupción de nuevas impresoras en el mercado ya hace posible imprimir en 3D en varios colores en empresas y entornos domésticos.
Los avances en tecnología 3D han puesto fin a los procesos más complicados en los que, tras finalizar la impresión 3D, había que recurrir a la pintura o técnicas de postprocesamiento para cambiar el color de alguna parte de la pieza tras la impresión. Además, en los objetos más complejos la única solución es imprimir a color desde el principio, una opción cada vez más extendida.
Varios extrusores
Las impresoras 3D pueden tener uno o varios extrusores con los que dar forma al material. Los software de las impresoras, como por ejemplo el de acceso libre Ultimaker Cura, permiten elegir los extrusores con los que se dará forma a las piezas. Estas dos partes de la máquina pueden estar cargadas con filamentos de distintos colores y, al combinarse, es posible imprimir en 3D piezas de dos colores para cualquier tipo de aplicación industrial, médica o educativa.
Esta puede ser una opción muy interesante, por ejemplo, en el campo de la Medicina, ya que la impresión 3D en colores facilita distinguir las distintas partes de los órganos y otras zonas del cuerpo humano a la hora de crear modelos para estudiar o preparar intervenciones. Las combinaciones de colores pueden aportar mayor realismo, algo que también es muy valorado en el campo educativo o entre las empresas vinculadas a la creación artística.
Con un solo extrusor
En el caso de que la impresora con la que se quiera imprimir en 3D en colores sólo tenga un extrusor existen otras soluciones. Una de ellas es emplear un software de laminado. Gracias a la creación de archivos .gcode , el usuario podrá cambiar el filamento de la impresora cada vez que lo requiera. En este caso la impresión en 3D en varios colores se lleva a cabo a través de técnicas que están restringidas a una capa como unidad mínima del proceso, algo que es importante tener muy en cuenta desde el diseño inicial.
Algunas recomendaciones
En Sicnova conocemos de primera mano varios modelos de máquinas y tecnologías con las que imprimir en 3D en colores en tu empresa o proyecto médico o educativo.
- La tecnología MJF de HP 3D Printing permite controlar las propiedades de cada vóxel. Un vóxel es un valor de una red regular en un espacio tridimensional. Controlar las propiedades de cada vóxel permite hacer realidad las aplicaciones con todo tipo de materiales y colores ilimitados.
- La impresión 3D en SLA ofrece una alta precisión, pero todavía no es posible imprimir a color con este material. Es por eso que Formlabs ha creado la resina Clear. Mezclada con tinta al alcohol, facilita conseguir resina de distintos colores para colorear herramientas como modelos anatómicos.
- Las máquinas de BCN3D también son capaces de imprimir modelos con dos colores o materiales en un único proceso gracias a la tecnología IDEX. Los materiales se configuran por separado. Después, las piezas se unen en BCN3D Stratos. Y para evitar que los colores se contaminen en los ejes X e Y, un truco es dejar una separación de 0.1 mm entre las distintas partes.